
Peronismo bonaerense cierra filas y arranca la pulseada por las listas
Con un pacto cerrado en la cúpula, el PJ provincial se ordena detrás de un objetivo común: frenar a Milei. Ahora, la disputa se traslada a los municipios, donde se juegan liderazgos hacia 2027.
El peronismo bonaerense consiguió lo que parecía difícil: cerrar filas en torno a un acuerdo de unidad para las legislativas de este año. En simultáneo, las principales terminales políticas se movieron ayer en dos escenarios: Máximo Kirchner, Sergio Massa y Axel Kicillof sellaron el pacto en la Casa de Gobierno, mientras que sus segundos —Eduardo Cergnul y Sebastián Galmarini (Frente Renovador), Facundo Tignanelli y Patricia García Blanco (La Cámpora) y Mariano Cascallares junto a Agustina Vila (kicillofismo)— afinaban los términos en el PJ nacional de CABA.
El acuerdo político está cerrado y las condiciones ya fueron consensuadas en una cumbre donde se priorizó la estrategia frente a la fragmentación. “Ya está todo, ahora hay que ponerlo por escrito y blindarlo para que no haya cambios de última hora”, explicaron desde uno de los sectores.
Sin embargo, a partir de mañana comenzará el capítulo más complejo: la negociación de las listas. Cada espacio presentará a sus candidatos y desplegará su propia narrativa para justificar lugares y protagonismo. La disputa más intensa se espera en los municipios, donde los intendentes medirán fuerzas pensando en su propio futuro y el tablero del 2027.
“El intendente siempre tiene la última palabra, y nadie quiere quedarse sin juego para lo que viene”, señalan en la mesa chica.
A nivel provincial y nacional se anticipa una negociación más contenida: las diferencias existen, pero la prioridad es mantener la unidad frente al adversario común, Javier Milei. “Puede haber algún chisporroteo, pero todos sabemos dónde está el enemigo”, confió un dirigente.
El peronismo bonaerense, pragmático como pocas veces, decidió postergar diferencias y apostar a una unidad táctica con un mensaje claro: para enfrentar a Milei en la provincia, no hay margen para divisiones.